Historia
Castillo de Huerta de Valdecarábanos
HISTORIA
IGLESIA SAN NICOLAS DE BARI
En un marco feudal podemos enmarcar la primera iglesia de Huerta, relacionada con la Encomienda de la villa en 1194 y construida a finales del siglo XII junto con el castillo. En esta primera construcción religiosa tendría un estilo cisterciense, propio de la orden, aunque sencillo en sus materiales y proporciones.
Ya en los “Cartularios de Toledo”, (catalogo documental) se recoge el acuerdo suscrito por el arzobispo de Toledo y la orden de calatrava para reconocer ambas partes la jurisdicción y derechos de cada una de ellas, en el orden económico, y en el organizativo “se pide a la orden presentar al arzobispo los párrocos que escoja para sus iglesias”.
En las “Relaciones “ que mando hacer Felipe II en 1575 tenemos noticia de la parroquia de San Nicolás de Bari y posteriormente en las” Descripciones del Cardenal Lorenzana”(Interrogatorio del Cardenal Lorenzana a vicarios, jueces eclesiásticos, párrocos y curas de la diócesis de Toledo), se hace mención a la parroquia de San Nicolás de Bari, narrando el hecho de ser trasladada su imagen de la iglesia de arriba a la nueva construida en el centro de la población, dato que nos indica la advocación de la parroquia a este santo. También existen referencias en el Libro Becerro(libro de relaciones de beneficios, prestamos, rentas y diezmos del arzobispado), a la organización eclesiástica y administrativa donde conocemos los diezmos que paga nuestra comunidad.
La advocación a San Nicolás de Bari está unida a la Orden de Calatrava, que a través de los reformadores cistercienses conocieron el gran predicamento que para esta orden monástica tenía el santo(1) .San Nicolás de Bari nace en Patara, en la región de Licia (actualmente dentro del territorio de Turquía) en una familia adinerada y desde niño se destacó por su carácter piadoso y generoso. Sus padres, fervorosos cristianos, lo educaron en la fe. Después de la muerte de sus padres, Nicolás heredó una gran fortuna que puso al servicio de los necesitados.
Son muchos los milagros que se le atribuyen. Uno de los de mayor repercusión es el que cuenta que, siendo aún joven, se compadeció de un desquiciado hidalgo de la localidad de Patara, en la Licia, que habiendo caído en la más absoluta miseria se había visto obligado a prostituir a sus tres hijas (según la leyenda hermosas y honestas). Para remediarlo, el santo de Bari echó tres zapatos —según otras versiones bolsos— llenos de oro, en otras tantas noches por la ventana del cuarto «donde dormía aquel padre desnaturalizado, con lo que proveyó el remedio oportuno». En otra versión, que haría historia, dejó caer por la chimenea unas monedas de oro que milagrosamente cayeron en unas medias de lana que las jóvenes habían dejado secando, y de aquí se supone la tradición de colgar las medias tejidas que sirven para recibir regalos en Navidad. Pellicer, en su Tratado histórico, informa que era habitual en la corte de Felipe II de España la puesta en escena el 6 de diciembre, día de San Nicolás de Bari, de la llamada Fiesta del zapato, con la eventual participación de alguna dama de Palacio.
Su nombre es notable también fuera del mundo cristiano porque su figura ha dado origen al personaje de Santa Claus (del alemán Sankt Niklaus), conocido también como Papá Noel. Asi de esta manera Nicolás de Bari se convirtió en la base de la figura de Papá Noel, Santa Claus o San Nicolás personaje legendario que según la cultura occidental trae regalos a los niños por Navidad (la noche del 24 al 25 de diciembre).
San Nicolás de Bari murió el 6 de diciembre del año 343 en Mira, pero sus restos descansan en la ciudad portuaria italiana de Bari, pues allí fueron a dar después de que fueran sacados de Turquía tras la conquista musulmana.(2)
En nuestra iglesia, la Capilla por antonomasia es la perteneciente a la familia Rincon, destinada a contener los restos de este Doctor Felipe Cristoval del Rincon de la Orden de Calatrava, que vivió en la Corte de Felipe IV.
De planta cuadrangular, en su ábside se puede datar la pertenencia a la Orden de Calatrava a través de los numerosos escudos que circunda la misma.
En el frontón de la cancela de acceso encontramos el blasón familiar en madera policroma. Ocupando una posición privilegiada se halla el mausoleo realizado en mármol tallado. Su parte central está ocupada por el escudo heráldico familiar, mientras que los laterales ofrecen sendos grutescos renacentistas que, con su boca, sostienen unas argollas de las que penden lapidas con las siguientes inscripciones.”: Flanco izquierdo: Aquí yace el doctor Felipe Cristoval del Rincon de la Orden de Calatrava natural de esta Villa y capellán de honor que fue de su Majestad y sacristán mayor de la dicha orden. Franco derecho: y administrador del sacro convento de ella dos trienios falleció a 17*de*año de 1647 su alma descanse en paz.”
Existe otro elemento artístico de gran relevancia ofrecido por el “Retrato de Caballero Calatravo” que bien pudiera representar al mismo Doctor. En él se nos representa en un efecto diagonal a un caballero con la capa de la orden Calatrava en actitud orante, un tanto ascética, con un rosario en sus finas manos, que se muestra extasiado ante la visión celestial de San Nicolás (3). Como curiosidad debajo de esta capilla se encuentra una habitáculo con un escalón de unos 40 0 50 cm de alto alrededor de la estancia, no sabemos la función exacta de esta construcción, podría ser un pudridero utilizado por la familia del Doctor Rincon.
Nuestra iglesia ha sido testigo de numerosas obras y reparaciones, desde 1679 se vienen realizando pequeñas obras de mantenimiento y necesidades según los tiempos que le ha tocado vivir, señalar como curiosidad que entre 1743 y 1745 a instancias del párroco de ese momento D.Juan Gómez de Aguenzo “la parroquia necesita una torre alta, en que se coloquen las campanas, para que se oigan en el pueblo”…, esta construcción fue vista como necesaria según los documentos de la época,
Cada uno de los párrocos que han pasado por nuestra iglesia y los que les sucedieron, D. Agustin Arévalo, D. Marcos Conde, D. Federico Camuñas, D. Manuel Torrijos, D. Emilio Perona, D. Miguel Andrés Llorca y el actual D. Ramón Pulido, dejaron y dejaran su impronta personal en cada uno de nosotros y en la parroquia en general. Todos tenemos memoria de su presencia en un momento especial de nuestra vida, nuestro bautizo, la primera comunión, la confirmación, nuestra boda…. Su presencia aunque controvertida a veces, algo inevitable, conforma la realidad de un pueblo que comenzó su andadura en el siglo XII (4)
(1)(4)Sara García Turrero, “Lo Sagrado y lo Profano”
(2)Wikipedia, Vida San Nicolás de Bari
(3)Luis Miguel Prieto, “Recorrido histórico-Artístico en la Villa de Huerta de Valdecarábanos